Aunque hoy derrame lágrimas amargas, me di cuenta que cada día eres más importante para mí. Aunque te contagie mis malos momentos, resistes. Y admiro tu fuerza, ojala pudiera menospreciar los obstáculos como tú haces. Pero los míos crecen cada vez que intento desacerme de ellos. Quizá sea cuestión del destino, no me gusta pensar que algo tan estúpido como la suerte pueda entorpecer mis pasos.
Eres la única persona que existe realmente a mi lado, que no desapareces cuando las cosas tienden a ir mal. Y casi siempre tienden a ir mal, desgraciadamente, mi balanza se inclinó hacia al lado equivocado. Pero ya no importa, tú me enseñaste a apreciar cualquier detalle insignificante de la vida, y a olvidarlo todo.
Es maravilloso tener a alguien así a nuestro lado, lo malo es si dependemos demasiado de la fortaleza que esa persona nos brinda. Un besazo.
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